La mirada atraviesa la lejanía.
Desde el horizonte
solo el silencio.
El sol fruta encendida
del árbol frondoso
que hecha sus raíces
en la oscura nada del universo.
Y de repente el ser
como un rayo en la tormenta.
Y el pensamiento como un idioma
de silencios,
recorre el mundo lleno de existencias fugaces.
La consciencia de existir
es el dictamen
de este paso por el mundo.
La lejanía se apaga derretida por los ojos cerrados...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Al Flaco Spinetta
Te miro desde mi tiempo oigo tu voz fina y ardiente, una musa se baña en tus rulos, y la otra coquetea con las cuerdas de tu guitarra rud...
-
Desasosiego a las orillas de la cama vacía, sabanas silenciosas envuelven el temor de la soledad, sombras de su cuerpo amuradas a la luz del...
-
Cuenta esta historia vil que en la ciudad de Junin camina un hombre gentil, arrogante y bagallero deja en el aire su olor a perejil. Viore ...
-
Seguramente hoy, allá lejos nadie piense en mí tal vez por eso vive adentro una congoja sin nombre, el dolor se desprende como una fru...
Fascinante tu poema.. Un castillo edificado con tu porpia arena, que se va desarmando, desgranando, de a poquito, de a mucho, feliz y tristemente.
ResponderEliminarCariños! (el último verso es alucinante)
la lejanía crece dentro de los ojos cerrados... Un saludo
ResponderEliminarGracias por tu comentario sol, me alegro que te haya gustado este poema.
ResponderEliminarSaludos
La lejania siempre esta en constante crecimiento mr fogg.
ResponderEliminarSaludos.
todo lo que llega a la razon es justo
ResponderEliminarDanilo gracias por leer este poema.
ResponderEliminarSaludos
Me gusta lo del idioma de silencios, un idioma para el que a veces no existe traducción.
ResponderEliminarVengo a agradecerte tus palabras en el blog de Cristian Basso y por ello te traigo como regalo un poema de Carlos Marzal en mi voz, pincha en:
pluscuamperfecto de futuro
Gracias por tu comentario, estere escuchando el poema que haz recitado.
ResponderEliminarSaludos