Todo parece un eco interminable,
un perpetuo grito de historia
del cual estoy terriblemente cansado.
Si las manos de Perón
están jugando a la mancha
dejenlas divertirse con la muerte.
Si el fútbol es un campo de batalla,
que cada cual tome su lanza
y clave en el ángulo al arquero enemigo.
Si Kischner baila el rap del pingüino,
y Menem escucha su réquiem de olvido,
que marchen juntos hacia un sol apagado.
La gota cae al interminable vacío...
y toda esta mugre me la llevo conmigo.
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He aquí la caída de mi ser dentro de mi propia sombra, me arrastro por la espiral luminosa de la luna, se desangra toda mi esencia, pedazo...
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He leído libros de historia, biografías hechas con pedazos de tiempo donde puede caer o realzarce el honor del mito o figura al cual estaba ... -
Todo tirado por el suelo, la catástrofe del desorden refleja la decadencia del pobre poeta, que duerme en el piso mientras en la oscuridad ...
Uff, cuántas cosas. Sí, creo que la mugre ya nos llegó al cuello. Creo que nos está asfixiando y no sé cuál es la vía de escape. Y asusta esta realidad y abruma y atormenta.
ResponderEliminarCreo que no son sólo los políticos los que tienen que cambiar, sino también el sistema. En un sistema capitalista y neoliberal siempre habrá hambre, pobreza y violencia por doquier.
Cariños!
Si Sol tienes razón el sistema actual esta agotado, buscar algo nuevo la verdad cuesta, pero ya habra algo quizás mucho mejor, nuestro trabajo es ir haciendo huella para que otros construyan el camino.
ResponderEliminarSaludos