El pasto seco se quema
el fuego lo borra
creando un paisaje distinto,
solo cenizas
y brazas rojas se extinguen
sobre la tierra,
también se apagan los recuerdos
de las sombras de niños
perdidos en el pastizal,
todo se quema con constancia
la constancia es el alma del fuego.
el fuego lo borra
creando un paisaje distinto,
solo cenizas
y brazas rojas se extinguen
sobre la tierra,
también se apagan los recuerdos
de las sombras de niños
perdidos en el pastizal,
todo se quema con constancia
la constancia es el alma del fuego.
Federico Espinosa.
Muy bueno, poeta. Abrazo grande
ResponderEliminarGracias Horacio por tomarte un tiempo y leer mis escritos. Abrazo.
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